El pretil es un elemento que protege o delimita un espacio con desnivel, como puentes, edificios o calles. Conoce su origen, sus materiales y sus formas, y algunos ejemplos de pretiles de piedra, hormigón, metal y mixtos.

Pretil arquitectónico: el murete de seguridad

El pretil arquitectónico es un murete de seguridad que se construye sobre puentes y otras estructuras para evitar caídas o delimitar una zona de tránsito. También se puede encontrar en cualquier otro lugar que presente desniveles entre diferentes planos. El pretil arquitectónico se asocia a la figura del antepecho, llamándose pretiles a las aceras o resaltes elevados que discurren a lo largo de dichos antepechos. El pretil arquitectónico se puede construir con diferentes materiales, como piedra, hormigón, metal o una combinación de ellos. El pretil arquitectónico se puede clasificar en dos tipos principales: los pretiles de contención y los pretiles de delimitación.

• Los pretiles de contención son aquellos que tienen la función de retener tierras o líquidos, evitando su deslizamiento o su desbordamiento. Los pretiles de contención se construyen en el perímetro de la edificación o en el interior de la misma, y se anclan al suelo mediante zapatas o pilotes. Los pretiles de contención se utilizan principalmente en edificios ubicados en terrenos con desnivel o en zonas con riesgo de inundación, como los sótanos o los muelles.
• Los pretiles de delimitación son aquellos que tienen la función de separar o dividir el espacio exterior de la edificación del espacio interior de la misma, o el espacio interior de la edificación de otros espacios interiores. Los pretiles de delimitación se pueden construir con materiales transparentes o translúcidos, como el vidrio, el policarbonato o el acrílico. Los pretiles de delimitación se utilizan principalmente en edificios de gran altura y de forma compleja, como los rascacielos, los centros comerciales o los museos.